martes, octubre 24, 2006

El aparatito de Lumiere: HIJOS DE LOS HOMBRES



*** y 1/2

Una muy interesante y lograda película de ciencia-política-ficción ambientada en el año 2027 que demuestra que los efectos especiales no son necesarios para este tipo de cine. Se trata de una producción norteamericana aunque ambientada y rodada en el Reino Unido, ya es la adaptación de una novela inglesa, con un reparto también casi exclusivamente británico. Y sin embargo, el director es mexicano, Alfonso Cuarón, quien junto con Guillermo del Toro y González Iñarritu son la avanzadilla internacional del cine mexicano. El director de Y tu mamá también y Harry Potter y el prisionero de Azkaban firma su mejor película hasta la fecha, una película de laque un director americano o incluso inglés no habría sacado tanto jugo.

En este año 2027 ya no hay niños en la tierra debido a una epidemia de infertilidad en todas las mujeres del planeta. Los más jóvenes tienen 18 años y la humanidad esta en consecuencia abocada a la desaparición. Una sociedad sin niños y condenada a muerte trae consigo unos gobiernos injustos totalitario, la irracionalidad destructiva del ser humano, el empleo desmedido de la violencia por todas las personas en cualquier ámbito, la desconfianza en el prójimo, la proscrición de la cultura y el arte, la perdida de los valores éticos, y en fin, el caos y la total miseria moral. Un panorama nada halagüeño que Cuarón describe con tonos grises y sombríos en un Londres casi devastado por sus propios habitantes sin ningún motivo y donde sobrevivir es toda una odisea. Ese escenario y premisa de la película, totalmente aterradores, es lo mas impactante de esta cinta, repleta de escenas y situaciones extremas que no dejan indiferente a nadie y que producen un auténtico mal rollo. Un ambiente, sucio, polvoriento, captado por una fotografía magistral ayuda a la presentación de un fresco verdaderamente sobrecogedor.

Grupos rebeldes, tildados de terroristas por los gobiernos, llevan a cabo una lucha por la supervivencia que deriva en lo salvaje, mientras que los medios de información no dejan de manipular y confundir. Theo (Clive Owen), un gris periodista, por medio de su amiga Julia (Julianne Moore) entra fortuitamente en contacto con los Peces, un grupo de resistencia contra el gobierno británico quien le encomienda vigilar a una joven africana refugiada (Cheiwetel Ejiofor), en una sociedad caótica en donde los refugiados políticos han aumentado hasta niveles aberrantes, y ayudarla a huir hacia el Proyecto Humano, una sociedad escondida que trata de huir de la destructiva situación a la que ha llegado el ser humano y de la que nadie sabe su existencia cierta. Jasper (Michael Caine), un hippy setentón, es una de los escasos reductos de humanidad que Theo encuentra como aliado y ayudará a nuestro protagonista a llevara a cabo su propósito.

Una historia tremenda que trata de reflexionar sobre la perdida de los valores de la sociedad actual y que pinta un futuro nada halagüeño en donde no se la razón de muchas cosas, aunque se puede intuir, como tampoco sabemos a ciencia cierta por que han dejado de nacer niños (¿tal vez porque se han negado a ello?) en un complicado y circular juego de causas-consecuencias. Muy bien dirigida y con una imponente puesta en escena, a esta película le falta un poco de más ritmo y sobre todo mayor concreción; tal vez si tuviese más de ello hubiese sido una grandísima película. No obstante, con lo que tiene, que es bastante, resulta un muy buen filme.

lunes, octubre 23, 2006

EL REY ARTURO: LA CONSTRUCCIÓN DE UN MITO (Y III)


El mito del Rey Arturo se extendió por toda Europa en el siglo XIII gracias a las obras de Chértein de Troyes, y numerosas versiones apócrifas y leyendas de romance anónimas surgieron sobre el tema. Pero fue la leyenda de la Búsqueda del Santo Grial la que en mayor medida estimulo la imaginación de los escritores que a partir del XIII retomaron el mito artúrico, un mito surgido de manera indeseada y totalmente ajena a la intención que su creador, Chrétien, le quiso imbuir y que se ha convertido en el principal referente de los mitos de Arturo en la cultura universal hasta la actualidad e incluso ha trascendido a las leyendas artúricas mismas.


La Vulgata y la Búsqueda del Santo Grial


El Arturo que escribió Troyes es considerado por la historia de la literatura como uno de los momentos cumbres de la novela de caballerías, influyendo en muchas de las obras del mismo tipo que reescribieron hasta bastantes siglos después, además de universalizar el mito en toda Europa. El cuento del Graal, obtuvo ya en los soglos XII y XIII enorme éxito, siendo muchos los autores franceses e ingleses que realizaron suspropias versiones inmediatamente, aunque tampoco se atrevieron a decir que era exactamente el susodicho Graal, algo que Chértein no pudio hacer en su obra ya que al dejo inacabada. Pero un suceso importante tendrá lugar en una fecha indeterminada a finales del XII (o a principios del XIII, según algunos autores), que será la publicación del ciclo artúrico en inglés vulgar por parte de la iglesia inglesa (redactad posiblemente por monjes cistercienses), conocida como La Vulgata , y que verdaderamente impulsó y culminó en cuanto a desenlace la historia artúrica, dándola a conocer a todo el mundo. Esta obra esta compuesta por cinco partes en donde se recogen todas las historias anteriores conocidas. Como principales aportaciones, decir que se establecen definitivamente los nombres anglosajones de los personajes (Gawain, Percivale, etc.), se recupera el personaje de Merlín -como ya hicieran los inmediatos continuadores de Troyes, el cual lo omitió en su obra-, se consolida el elemento fantástico (Avalon, la magia de Merlín) y sobre todo, da identificación al Graal, llamada “The Holy Grial” (el Santo Grial), el cual es descrito como la famosa reliquia que en aquel tiempo (y en la actualidad) se decía encontarse en la abadía de Glastonbury: el Caliz que Cristo utilizó en la última cena y en la cual uno de sus discípulos no apóstoles, José de Arimatea recogió su sangre en el lecho de muerte.

Esta supuesta reliquia y su historia eran muy conocidas en el Reino Unido, estando la iglesia inglesa convencida de su autenticidad (según la tradición, San José de Arimatea llegó a Inglaterra desde la Galia para evangelizar y allí fundo el monasterio de Glastonbury, llevándose consigo la copa), y hasta entonces jamás nadie la había llamado Holy Grial. Fue tal la popularidad de la versión de la Vulgata que los continuadores artúricos del XIII retomaron la historia del Santo Grial tal y como fue descrita en La Vulgata: como columna vertebral de la historia del rey Arturo y de los Caballeros de la Mesa Redonda. A partir de ese momento, ya tal como los religiosos querían, la historia de Arturo tendrá-y tiene- un enorme componente religioso, que es la busqueda de la reliquia de las reliquias.


En la Vulgata, tal y como describía Troyes, el caballero Perceval tiene un encuentro con el Grial en el castillo del Rey Pescador, pero no preguntará sobre el herido monarca, un error por su parte que provocará la muerte de este. Mas tarde, Percival tratará de redimir su error buscando junto al resto de los caballeros el Santo Grial a petición de Arturo, en lo que vendría a ser la epopeya culminante de los caballeros de la Mesa Redonda. Lancelot, el mejor caballero, estaba convencido de ser el campeón del Grial, pero al estar cometiendo adulterio con la Reina Ginebra, Dios le privó de ganarlo, siendo Perceval, el arrepentido, al final “El caballero del Grial”.

La belleza de esta historia del Santo Grial, ha sido una razón suficiente para que haya sido retomada continuamente en sucesivas versiones. Pero es realmente significativo como a partir de ese momento a todos los supuesto cálices de la última cena supuestamente hayados se les ha venido denominando “el Santo Grial”, creyendo que ese es su genérico nombre e ignorando que la palabra grial es una anglización de un palabra bretona (graal) surgida en el XII de la imaginación de un literato, y no una palabra hebrea del siglo I. El mito del Santo Grial de Glastonbury (conocido por la historia por ese nombre a partir de este momento), el de San José de Arimatea, ha sido materia de estudio de historiadores, antropólogos y hasta de expertos en lo esotérico, dando además errónea veracidad originaria a su nombre rebautizado y lo que es mas lamentable, conectándolo originariamente con los mitos artúricos, olvidándose de que su inclusión fue tardía e impostada, por motivos evangelizadores (nótese además como el lugar de Glastonbury, identificado con Avalon, ya estaba unido a la leyenda artúrica). El significado religioso de al reliquia junto con lo sugerente de la mitología artúrica han dado lugar a toda una serie de teorías descabelladas y sin fundamento, en donde se olvida el verdadero origen de la palabra y del mito. No es necesario citar cierto best-seller, donde se especula un absurdo origen de la palabra y el concepto de Santo Grial, obviando el auténtico origen de los mismos. Hay que decir que según algunos autores (Rollerston) la derivación de Graal a Grial provendría de una palabra latina que no vino ni pintada al efecto: cratella (vasija).

Volviendo a la búsqueda del grial y la historia de Perceval, hay que destacar que esta última tuvo tanto éxito que apareció como romance independiente en varias ocasiones en los últimos siglos de la edad media. A principios del XIII el francés Gautier pone en acción a Perceval junto con Gauvain (Gawain), describiendo algunos prodigios producidos por la reliquia. Tanto este autor como Wolfram Von Eschenbach prosiguen con el carácter cristiano del Grial. Este último en su Parzibal (hacia 1200), escrito en alemán, el elemento religioso es aún mayor y el personaje central es tratado de manera bastante independiente respecto a la Mesa Redonda. Aquí el error de nuestro héroe (tratado como una leve falta) es que se equivoca de pregunta al rey herido, llamado Anfortas. Esta obre, buena muestra de al literatura alemana medieval, demuestra hasta que punto los mitos de Arturo se habían extendido por Europa y habían adquirido propia personalidad en muchos de sus personajes.

El tema de la búsqueda (la del Santo Grial), es por otra parte, un tema recurrente en el imaginario europeo y occidental, cuya significación en toda la leyenda arturiana será enorme (la búsqueda de la perfección, de lo maravilloso), hasta tal punto de convertse casi en el leiv motiv de todo el mito arturiano, mas allá de loas 12 batallas descritas en todas las historias.

Los siglos pasaron. Las historias también. En el siglo XV se producirá por fin al autentica culminación de la historia del Rey Arturo, gracias a Thomas Mallory.


La Morte D´Artur de Thomas Mallory: el ciclo se cierra


La obra La Morte D´Artur escrita por Thomas Mallory en 1469 o 1470 y publicada en 1485 es ya la plasmación de la historia del Rey Arturo y los caballeros de la Mesa Redonda tal y como es conocida universalmente. La muerte de Arturo, esta basada en todas las fuentes anteriores evolucionadas, de la que es un compendio. Expertos en literatura consideran esta obra como la primera novela moderna de la literatura inglesa, excepcioanlmente escrita y con un extraordinario tratamiento de la figura de Arturo, sus hazañas y todos los demás personajes.

A finales del siglo XV, huelga decir que la figura de Arturo de Inglaterra era ya el prototipo del buen y justo soberano y gobernante, características que están subliamadas en esta obra. Conviene decir, respecto a su autor, que hasta la fecha se ha conocido muy poco de Thomas Mallory, hasta el punto que muchos dicen que se trata de un pseudónimo. Varios personajes se disputan la verdadera identidad de Mallory, que al parecer vivió una vida tan novelesca como sus escritos.

En La muerte de Arturo se establecen varias aportaciones definitivas: ya se mencionan todos los nombres de los 12 caballeros de la Mesa Redonda (si incluimos al traidor Mordred), completando a los ya conocidos (Galahad, Perceval, Tristán, Kai, etc) con otros creación del autor, siendo el mas significativo en la historia Bors. Aparece un nuevo personaje que será fundamental en al historia, Morgan La Fay (Morgana), hermana de Arturo y que aprende las artes mágicas de la mano de Merlín, el fiel consejero hechicero del monarca. Auténtica villana en esta versión definitiva, usando sus poderes, Morgana consigue acostarse con Arturo y engendrar a Mordred, que en esta obra en consecuencia pasa a ser no solo sobrino sino también hijo del rey. La hechicera será la que inculque la ambición y la maldad en el joven, con vistas a convertirse en el futuro en el nuevo rey. Muy posiblemente este malévolo personaje sea un trasunto de la Morrigan irlandesa, una bruja de la mitología celta precristiana de aquella isla. El elemento mágico se refuerza también con el protagonismo otorgado a Vivian, la Dama del Lago, compañera y maestra de Merlín, que ofrece a Arturo la espada Excalibur, una vez rota la suya (en versiones posteriores, Excalibur y la espada de la piedra son la misma arma). Mallory introducirá elemntos de los siglos XIII y XIV adaptando los avateres de la historia a las épocas mjor conocidas por el público, describiendo justas, armaduras y otorgadon el título de Sir a los caballeros.

En la obra de Mallory, Arturo, tras ser proclamado rey de Inglaterra, se hace con al obediencia de 11 pretendientes al trono que se convertirán en sus primeros caballeros, combatiendo con el en las doce batallas contra los germanos y contra los romanos. Tras el periodo bélico, temiendo que la ociosidad de la paz llevase a sus caballeros a luchar entre ellos pidió al sabio Merlín soluciones, quien decidió proponer una serie de pruebas extraordinarias a todos los caballeros, la mayor parte de las cuales ya fueron descritas en las obras anteriores (Gawain y el Caballero Verde, La Dama de la Fuente, etc.). También cuanta Mallory el adulterio de la esposa de Arturo con su mejor caballero y amigo, Lancelot, ignorado en un principio por todos. La última prueba de Merlín, la definitiva, será la búsqueda del Santo Grial, en la cual Lancelot fracasa por su pecado, siendo al final conquistado por Percival, en compañía de Galahad (en algunas versiones posteriores es este caballero el campeón del Grial) y Bors. La pérfida Morgana, que gracias a su magia conocía el asunto de la reina con el caballero, lo saca a la luz. La reina es sentenciada a muerte, Lancelot la rescata y huye con ella y el rey les persigue por toda Inglaterra, dejando el reino en las irresponsables manos de su heredero Mordred, tal y como su madre deseaba, quien siembra el caos. Arturo consigue recuperar a su mujer y la recluye en un convento, huyendo Lancelot y terminando sus días como eremita en penitencia por su grave falta de traición. Al regresar a Camelot, Arturo se encuentra con una guerra originada por su hijo-sobrino y con la Mesa Redonda disuelta (lancelota había matado antes accidentalmente a Gareth). En Salisbury (y no en Glastonbury, como decía la tradición) tiene lugar el duelo a muerte entre padre e hijo en la que ambos se matan mutuamente.

La muerte de Arturo inspirará la imaginación de toda Europa durante siglos y convertirá al monarca en un personaje inmortal. Hallazgos sobre el verdadero Arturo dux bellorum britano-romano otorgaron una dimensión de realidad a al leyenda, como la teoría muy defendida desde el siglo XVIII de que Camelot era Tintagel (Cornualles), donde se conservan aún unas imponentes ruinas de una fortaleza britona, obviando que las primeras crónicas situaban el cuartel general de Arturo en Caerlon (Gales), algo que historicamente parece cierto. No obstante, es muy posible que el verdadero Arturo residiese en aquel lugar durante un tiempo.

Han sido muchas las obras literarias posteriores a La Morte D´Artur que han tratado del Rey Arturo, siendo la mas citable los Idils que el autor romántico Alfred Tennyson escribió en el XIX, relanzando el mito arturiano. Literatura (Steinbeck), cine, televisión, teatro, se han hecho eco de la figura del legendario monarca, que hasta nuestros días ha llegado como uno de los mitos mas importantes de la historia de al humanidad: el buen soberano amante de la justicia y la amistad y enemigo de la traición, la vileza y el desdén.


Merlín el mago: un mito en si mismo


Dentro del ciclo artúrico, el personaje que sin duda reviste de mayor importancia y que mas ha trascendido dentro de la fabulación es el mago Merlín. Como ya vimos en los capítulos anteriores, fue citado por primera vez por Geoffrey de Monmouth en su pseudohistórica Historia de los reyes de Britania, con el nombre de Merlinus. Ya a partir de ese momnto se convierte en un personaje central de las historias artúricas escritas- aunque Troyes no lo citase tal vez por contraponerse esa figura mágica con el amor cortes que impregnaba sus escritos- apareciendo como un mago y sabio de enorme poder que es consejero de Arturo además de ser su mentor en su juventud, como también lo fue de su padre, Uther Pendragon.

Aunque, como vimos, no se hace mención de él en las primeras leyendas orales británicas y tampoco se le cita en las lais bretonas conservadas, gracias a Monmouth su figura se extendió en el ciclo artúrico tanto en gran Bretaña como en Francia, de hecho es muy posible que en Bretaña este personaje ya interveniese en las leyendas artúricas (perdidas) como lo demuestra su inclusión en los romances en francés de Robert de Wace en el siglo XII, quien bebía fundamentalmente de las fuentes populares galas sobre Arturo. En todo caso, la figura de Merlín es claramente una reminiscencia del mundo mágico de los druidas celtas y es descrito siempre con atribuciones físicas y ocupacionales de esta mítica casta sacerdotal precristiana. Ya vimos que las primeras referencias a un tal Myrddin, posible raíz del personaje, aparecieron en Gales en la época romana, sin relación con Arturo, con atribuciones casi divinas.

Pero lo cierto, es que este personaje pudo existir de tomar ciertas algunas teorías. A un personaje llamado Myrddin el loco se le cita algunos poemas de los códices galeses Libro Negro de Carmarthen y Libro Rojo de Hergest. Este Myrddin era un britón del norte (de Escocia o el norte de Inglaterra), bárbaro picto no latinizado a juzgar por su nombre céltico, que luchó en la batalla de Arferydd en 573, es decir, unos cuantos años después de las batallas que el historiador Nennius atribuía a Arturo. De existir Myrddin según estos códices, no llegó a conocer a Arturus. Según estos documentos, Myrddin perdió la razón como consecuencia de aquella batalla en la que tomó parte y vivió durante largo tiempo en un bosque del suroeste de Escocia. Se cree que el verdadero nombre del personaje era Lailoken y que fue bautizado Myrddin cuando la hiostoria llegó al sur de Gran Bretaña por el empuje de los invasores anglosajones. Myrddin el loco, tomado como tal, ejerció como bardo y profeta según estas primeras leyendas británicas inglesas. En Gales, según algunas estelas funerarias e inscripciones muy antiguas, existía una deidad con su mismo nombre, ¿derivación, casualidad? En todo caso, este Myrddin el loco tenía muchas características de los druidas celtas: adivinación, curanderismo, etc.

Existe otra tradición anterior a la primera mención por Geoffrey de Merlín dentro del ciclo de Arturo. Es la correspondiente al ya mencionado Nennius en el siglo IX, quien como vimos dio la primera noticia histórica de un militar romano britano llamado Arturus. El habla de Ambrosio Aureliano, que vivió en la Britania en la época del imperio romano, y que de niño profetizó la muerte del rey britón usurpador Vortigern. Algunos textos anteriores al IX (Tildas, S.VI) ya mencionaron este nombre como un caudillo militar que derrotó a los sajones en el siglo VI, y que podría identificarse con el propio Arturo, o bien se trata de una coincidencia de nombres (podía ser en la sociedad romana) o podrían tratarse de parientes. ¿Fueron Merlín y Arturo el mismo personaje histórico? No parece posible a juzgar por toda la información posterior, con todo, la coincidencia resulta desconcertante. Según Nennius, Ambrosio no tenía padre conocido (insinuaba, como se creía en la época, que su progenitor podría haber sido una criatura maléfica que engatusó a su madre)

Geoffrey tomó la crónica de Nennius sobre Ambrosio para caracterizar a su Myrddin, al que rebautizó Merlinus en lugar de Merdinus, su latinización natural, ya que este nombre recordaba a la palabra normanda “merde” (mierda). De las historias sobre Myrddin el loco, el autor inglés solo usó el chamanismo del personaje, fijando su atención en el Ambrosius de Nennius relatando su profecía infantil y, en conexión con las creencias medievales, atribuyendo la paternidad del personaje al Diablo, de quien Merlín heredó el don de la videncia pero no su maldad. Curiosamente, este autor llama Ambrosio al hermano de Uther, el padre de Arturo. Geoffrey describe a Merlinus, nacido en Carmarthen, como preceptor y maestro de Uther, pero no guarda relación directa posterior con Arturo, a pesar de ser el, gracias a sus artes mágicas, el responsable del nacimiento del monarca. Es muy significativo que este autor atribuya a Merlín el transporte de los dólmenes de Stonehenge desde Irlanda a Inglaterra, conectando la religión celta con el personaje e incidiendo así en su carácter druídico. Geoffrey llegó a la conclusión de que Merlín era un druida, como se podría deducir libremente por sus historias anteriores. Su relación con la familia de Arturo fue una invención propia, en la que pudo influir la relación de nombres de personajes antes aludida. El autor también incluyó una serie de profecías (que escribió antes de su Historia de los reyes de Britania) atribuidas a Merlín.


En las versiones posteriores el personaje va tomando forma. Wace, quien lama a Merlinus Merlin, no aporta mucha novedad, pero Layamon escribió que el niño Merlín. Tras la profecía de Carmarthen fue entregado a 12 caballeros para ser custodiado mientras el rey Vortigern interrogaba a su madre para averiguar el misterioso origen parental del niño. No se menciona en estos autores la relación de Merlín con Arturo como consejero, sino como maestro de Uther y responsable de la concepción de Arturo. Robert de Boron, uno de los continuadores de Chrétien de Troyes, ya menciona al mago Merlín consejero del Rey Arturo y creador de la Mesa Redonda, hijo de un ángel caído y una doncella.

Las versiones posteriores incidirán en la caracterización de Boron, siempre teniendo presente la magia de Merlín como herencia del mundo druídico y de las creencias precristianas. Así, Merlín fue discípulo mágico de la hechicera Viviana, con la que vivía en una casa de cristal y maestro en las artes de hechicería de Morgana, la hermana de Arturo, según Mallory. No cabe duda que Merlín ocupa en el mundo de la imaginación un lugar tan importante como el del propio Arturo.